TODO ES UN REFLEJO

Soy una tía sencilla, tranquila, y con algo de sensibilidad. Nunca he pretendido nada con las fotos más allá de poder recordar el momento que estaba viviendo. Desde que me cayó una cámara en las manos la he entendido como una forma más de expresión, sin adornos, porque me parece que el viaje es perfecto así.

Así que siempre siempre la experiencia va primero, por encima de todo, primero nos tiramos al río, nos reímos y luego vemos. Con suerte habrá alguien que lo capte.

Ver a la gente disfrutar en los mejores momentos de su vida, con sus personalidades, sus reacciones; y poder descubrirme y darle forma... os juro que es un regalo.